La cantinela que tanto ha sonado este verano comienza a tomar cuerpo y forma cuando tan solo llevamos disputadas cuatro jornadas de liga: parece que el título va a ser cosa de dos. Barcelona y Real Madrid han demostrado hasta la fecha una pegada y una contundencia de resultados que pocos equipos parecen capaces de seguir. Un ritmo frenético que ayer prosiguió el equipo de Pep Guardiola en Santander, con una goleada liderada por un Leo Messi que sigue haciendo méritos para galardonarse el próximo Balón de Oro.
El Barça sigue mostrando a los aficionados el mejor fútbol de todo el continente europeo. Juegue quien juegue, independientemente del campo y del rival, la apisonadora azulgrana arroya todo lo que se cruza en su camino. Ayer fue testigo el Racing, que vio como en seis minutos geniales de Ibrahimovic y la estrella argentina se esfumaba su partido.
Uno de los pocos equipos que quiere seguir dando emoción a la liga es el Sevilla de Manolo Jiménez, que está cuajando un extraordinario inicio de campaña y que, en la noche de ayer, doblegó al Mallorca (2-0) demostrando que, además de buen fútbol, también tiene pegada de campeón. Squilacci y Perotti fueron los goleadores de un partido en el que Jiménez se permitió el lujo de dejar en el banco a Kanouté. Pero viendo el once que puso sobre el césped del Sánchez Pizjuán, con Luis Fabiano y Negredo en la punta de ataque, se pueden hacer una idea de la infinidad de recursos con los que cuenta el equiipo de Nervión de medio campo hacia delante.
Esta noche, turno del Madrid de Pellegrini
El fútbol continúa en la tarde de hoy con todos los ojos puestos en el Madrigal, con la vuelta de Pellegrini al banquillo que le hizo grande. El Real Madrid tratará de seguir la estela del Barça con un once que presenta varios cambios respecto al que alineó el pasado domingo ante el Xerez. Todo hace prever que Raúl, Gago y Benzema cederán sus puestos en beneficio de Guti, Granero e Higuaín. De producirse estos cambios, el técnico madridista adoptará el sistema que tanto viene reclamando la afición (4-3-3), para tener un mayor control del balón y dejar que los genios de arriba, Cristiano, Kaká y en la tarde de hoy, Higuaín, deambulen a sus anchas y tengan total libertad de movimientos ofensivos.
El otro plato fuerte del miércoles se vivirá en el Vicente Calderón en el partido entre el Atlético de Madrid y el Almería. Abel vive sus horas más bajas desde que llegó al banquillo rojiblanco y, tras un esperpéntico comienzo de temporada, en el que ha firmado un balance de dos derrotas y un empate (actualmente ocupa puestos de descenso), está obligado a ganar si no quiere que la parroquia rojiblanca se subleve de manera definitiva contra un equipo que sigue arrastrando las mismas dudas de la temporada pasada.
El Barça sigue mostrando a los aficionados el mejor fútbol de todo el continente europeo. Juegue quien juegue, independientemente del campo y del rival, la apisonadora azulgrana arroya todo lo que se cruza en su camino. Ayer fue testigo el Racing, que vio como en seis minutos geniales de Ibrahimovic y la estrella argentina se esfumaba su partido.
Uno de los pocos equipos que quiere seguir dando emoción a la liga es el Sevilla de Manolo Jiménez, que está cuajando un extraordinario inicio de campaña y que, en la noche de ayer, doblegó al Mallorca (2-0) demostrando que, además de buen fútbol, también tiene pegada de campeón. Squilacci y Perotti fueron los goleadores de un partido en el que Jiménez se permitió el lujo de dejar en el banco a Kanouté. Pero viendo el once que puso sobre el césped del Sánchez Pizjuán, con Luis Fabiano y Negredo en la punta de ataque, se pueden hacer una idea de la infinidad de recursos con los que cuenta el equiipo de Nervión de medio campo hacia delante.
Esta noche, turno del Madrid de Pellegrini
El fútbol continúa en la tarde de hoy con todos los ojos puestos en el Madrigal, con la vuelta de Pellegrini al banquillo que le hizo grande. El Real Madrid tratará de seguir la estela del Barça con un once que presenta varios cambios respecto al que alineó el pasado domingo ante el Xerez. Todo hace prever que Raúl, Gago y Benzema cederán sus puestos en beneficio de Guti, Granero e Higuaín. De producirse estos cambios, el técnico madridista adoptará el sistema que tanto viene reclamando la afición (4-3-3), para tener un mayor control del balón y dejar que los genios de arriba, Cristiano, Kaká y en la tarde de hoy, Higuaín, deambulen a sus anchas y tengan total libertad de movimientos ofensivos.
El otro plato fuerte del miércoles se vivirá en el Vicente Calderón en el partido entre el Atlético de Madrid y el Almería. Abel vive sus horas más bajas desde que llegó al banquillo rojiblanco y, tras un esperpéntico comienzo de temporada, en el que ha firmado un balance de dos derrotas y un empate (actualmente ocupa puestos de descenso), está obligado a ganar si no quiere que la parroquia rojiblanca se subleve de manera definitiva contra un equipo que sigue arrastrando las mismas dudas de la temporada pasada.
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